-La hoy senadora del PVEM se inició en el PRD, pasó el PRI y ahora busca cobijo en MORENA
-La seguridad es el tema que menos le importa y quiere convertir a Yucatán en un estado violento
Mérida, Yucatán, 21 de diciembre de 2019.- La senadora que por conveniencia política milita hoy en el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) Verónica Camino Farjat, ha sido un ejemplo muy claro de lo que es el “chapulinismo” o ir saltando de un partido a otro de acuerdo con los intereses personales, electoreros o económicos y sin ninguna convicción.
Camino Farjat empezó su carrera política en el PRD cuando su madre, la exalcaldesa de Tizimín y exdiputada local por el PRI, Verónica Farjat, abandonó las filas tricolores para sumarse al partido del Sol Azteca. Luego de su estadía en el PRD, y por así convenir a sus intereses particulares y sus ambiciones políticas, la hoy senadora Camino Farjat regresó al PRI donde le dieron la oportunidad de ser la directora del Centro Estatal de Prevención Social del Delito y Participación Ciudadana (Cepredey) en el gobierno que encabezó Rolando Zapata Bello, donde hizo un trabajo pésimo y aumentó la delincuencia. Luego, fue diputada local por el mismo tricolor y hoy es senadora por el Verde Ecologista.
Actualmente, Verónica Camino se dice tiene un acercamiento con Morena lo que hace pensar que ella sólo busca sus intereses políticos y no le importa aliarse con un partido que ha llevado a la seguridad pública al fracaso, tanto en los estados donde gobierna como a nivel nacional.
Recordemos que Morena gobierna en Baja California, Chiapas, Ciudad de México, Puebla, Tabasco y Veracruz, donde los índices de criminalidad como el asesinato, el secuestro y el robo son de los más altos de los últimos años y esto mismo puede ocurrir en Yucatán si no se toma en serio la seguridad de las familias, algo que como se vio durante si tiempo en el Cepredey, tampoco le importó a Camino Farjat.