Mérida, Yucatán, 1 de julio de 2020.- Urge un programa emergente de recuperación del empleo dirigido a la población de bajos ingresos más afectada por la emergencia sanitaria por Covid-19, señaló la diputada federal Dulce María Sauri.
Al señalar que son importantes las acciones del Gobierno, a través de las transferencias, a los hogares de menor ingreso para contener el aumento de la pobreza, pero no son suficientes para contener esa drástica caída en los recursos económicos familiares.
Por ello, también es necesario considerar estrategias gubernamentales dirigidas a reactivar el empleo y proteger a aquella población que en 2019 no se encontraba en condiciones de pobreza o vulnerabilidad, pero que, por la crisis actual, tendrá graves y difíciles afectaciones en su ingreso.
“Es urgente el diseño de medidas económicas que permitan desarrollar un programa emergente de empleo y de acciones soporte, que permitan reducir el efecto de la pobreza ante la caída del ingreso de miles de familias mexicanas”.
La diputada federal yucateca dijo que, la población en pobreza en áreas urbanas, podría estar en mayor riesgo ante la emergencia sanitaria debido a factores que potencian la probabilidad de contagio, como la necesidad de salir a trabajar en áreas con mayor aglomeración, alta probabilidad de vivir en condiciones de hacinamiento, con un menor acceso al agua y la existencia de comorbilidades.
De acuerdo a Coneval, hasta ahora el desarrollo de la crisis sanitaria por Covid-19 y la trayectoria de contagio han sido mayores en el ámbito urbano, por lo que la mayor afectación podría encontrarse en áreas urbanas y ser más profunda para aquella población con menos recursos.
Esta caída del empleo formal es de las más grandes desde que se tiene registro en México y es comparable con las reducciones experimentadas durante la crisis de 2008 y 2009.
Las entidades federativas más afectadas durante abril de 2020 fueron: Quintana Roo, Baja California Sur, Guerrero, Nayarit y Coahuila. Y según informó el IMSS, el pasado 12 de junio, México perdió 1 millón 30 mil 366 empleos registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social durante marzo, abril y mayo